¿Cómo elegir tu fondo de inversión?

28/08/13 - Análisis Fondos de inversión y Sociedades

A la hora de elegir correctamente un fondo de inversión hemos de analizar distintos elementos. En este caso, nos vamos a centrar en hacer un estudio real de nuestro propio perfil de inversor, ya que sin esta valoración previa, posiblemente incurramos en fallos a la hora de hacer la elección más acertada.

 
 

¿Cómo elegir tu fondo de inversión?

Como norma general, es posible destacar que a mayor nivel de riesgo más posibilidades de obtener altas rentabilidades… pero también mayores pérdidas. Y es ahí el quid de la cuestión, ¿hasta donde somos capaces de tolerar?

Para ello, lo más recomendable es acudir a tu entidad o asesor financiero. Es él quien mejor puede valorar tu grado de riesgo con un estudio personalizado.

Aun así, existen algunas claves que te pueden ayudar a “conocerte”.

Lo primero es conocer nuestra situación económica. Si disponemos de estabilidad laboral, ahorros, hipotecas, si nos podemos permitir tener inmovilizado parte de nuestros ahorros a medio o largo plazo o si, incluso, podemos “llegar a permitirnos” materializar pérdidas.

Igualmente importante es saber cual es mi objetivo de inversión ¿Conseguir altas rentabilidades o mantener mi posición económica? Para la primera, hemos de ser conscientes de que debemos asumir mayores riesgos y, por tanto, también cabe la capacidad de tener pérdidas.

Por otro lado, ¿entiendes realmente en qué producto estás invirtiendo? El principal problema que encontramos en la comercialización de las ya famosas preferentes es que fueron “colocadas” a personas que no tenían los conocimientos necesarios para comprender el riesgo que éstas implicaban. Por esto, es necesario que entiendas bien el producto, los riesgos que implican, el estilo de inversión, etc. Los productos con los que hayas podido operar anteriormente pueden ser una buena pista para conocer tu perfil.

Otra clave a la hora de conocernos, ¿qué harías en caso de una pérdida de valor del fondo? Plantearnos esto nos puede dar una idea de la capacidad de asumir pérdidas que tenemos y es que podemos afrontarlo de distintas formas:

  1. Deshaciendo las posiciones en el fondo: “no estoy dispuesto a perder mi dinero”
  2. Mantengo mi posición actual: “mientras no venda o traspase no asumo pérdidas (ni ganancias) y para mi lo importante es el fin, no el camino.”
  3. Aumento mi exposición al fondo: “confío plenamente en este fondo y lo veo como una oportunidad, compro.”

Si en todas estas situaciones te has sentido más identificado en la posición más conservadora, mejor busca un fondo de bajo riesgo. El mejor inversor no es aquel que asume mayores riesgos, si no aquel que es consciente de su capacidad y sabe actuar en consecuencia.

¿Lo tiene ya?

Con quefondos.com puede buscar y comparar aquellos fondos de inversión que más se adecúen a su estilo.

Sergio Ortega (VDOS)