La apuesta tecnológica de Gescooperativo

25/09/14 - Análisis Fondos de inversión y Sociedades

La demanda de tecnología continúa siendo alta a nivel global. Los países en desarrollo necesitan desplegar una gran red de infraestructuras de telecomunicaciones para potenciar su desarrollo tecnologico y los mercados de países desarrollados demandan continuamente versiones mejoradas de productos exitentes y nuevas tecnologias que mejoren su calidad de vida.

La apuesta tecnológica de Gescooperativo

Posiblemente por invertir en tecnologías innovadoras de todo tipo, tanto telecomunicaciones como biotecnología, uno de los fondos de inversión que mejores resultados obtiene en el año, dentro de la categoría sectorial VDOS de TMT, es RURAL TECNOLOGICO RENTA VARIABLE, de Gescooperativo, con una rentabilidad en el año de 21,60 por ciento.

Referenciado al índice tecnológico estadounidense NASDAQ 100, invierte hasta un 85 por ciento de su cartera en renta variable, mayoritariamente de empresas de elevada capitalización y cuya actividad se centre en la explotación de nuevas tecnologías de los sectores de telecomunicaciones, internet, biotecnología, farmacia u otros sectores complementarios.

Con un horizonte de inversión a largo plazo, su cartera incluye empresas con valoraciones razonables y buenas perspectivas de beneficios.

Los gestores del fondo son Carlos Camacho Velasco y Beatriz Gutiérrez, Responsable de Renta Variable. Carlos ha sido gestor de renta variable entre septiembre de 2007 y febrero de 2012, encargándose de la gestión de Rural Tecnológico Renta Variable desde marzo de 2012. Es licenciado en Administración y Dirección de Empresas por ESIC.

Para la selección de activos a incluir en cartera, la gestora se centra en los fundamentales de las compañías. El proceso inversor comienza con un análisis de la situación macroeconómica, evolución de los mercados y perspectivas, en el comité de inversiones de la gestora, definiendose una estrategia a nivel global. A partir de aquí, el equipo gestor se encarga de la generación de ideas y la selección de compañías. Se analizan factores como momento del ciclo de negocio, barreras de entrada o competidores, dentro del sector, así como el equipo directivo de las empresas, su modelo de negocio, productos y datos fundamentales. Tratan de identificar compañías con ventajas competitivas, que obtengan una rentabilidad razonable sobre el capital empleado, con un nivel de deuda controlado y valoraciones atractivas y que sean capaces de generar flujo de caja libre.

La cartera final incluye entres sus mayores posiciones la biotecnológica Gilead Sciences, que ha tenido una positiva evolución, impulsada por las ventas de su fármaco para la hepatitis C. Muestra una fuerte generación de caja operativa e incremento de la recompra de acciones. Otra de sus mayores posiciones es Apple, una empresa que cuenta con nuevos productos en el corto plazo, optimización de caja (con la consecuente mejora en la remuneración al accionista vía incremento del dividendo y recompra de acciones) y valoración atractiva. También entre las mayores posiciones incluye Google, que la gestora estima es uno de los negocios más sólidos del mundo con crecimientos de doble dígito y retornos sobre el capital empleado elevados. Seagate Technology y Western Digital ocupan asimismo un porcentaje entre las mayores posiciones en la cartera del fondo. Ambas compañías disfrutan de una posición líder en el mercado mundial de discos duros, ya que controlan el 85 por ciento del mercado, lo que supone control de precios y barreras de entrada; siguen cotizando a múltiplos atractivos y cuentan con una sólida posición financiera. Por países, la mayor ponderación se centra en Estados Unidos, con un porcentaje poco significativo en Reino Unido y en euros (por debajo del 2%).

La evolución histórica del fondo por rentabilidad lo sitúa entre los mejores de su categoría por rentabilidad, en el primer quintil a uno, dos, tres y cinco años, con un dato de volatilidad a tres años de 13,16 por ciento, que se reduce hasta 8,94 por ciento en el último año. En este último periodo, su Sharpe es de 4,11 y su tracking error, respecto al índice de su categoría, de 5,80 por ciento. La inversión en este fondo requiere una aportación mínima de 300 euros, aplicando una comisión fija de 2,25 por ciento y de depósito de 0,20 por ciento.

La gestora sigue confiando en las compañías incluidas en la cartera del fondo, si bien mantienen su estrategia de ir vendiendo a medida que el potencial de revalorización se reduzca y encuentren otras oportunidades de inversión. Se mantienen por ello muy atentos a la presentación de resultados del tercer trimestre para aprovechar oportunidades generadas por sobrereacciones del mercado.

No descartan que podamos asistir a correcciones en el corto plazo tras la excelente evolución del índice Nasdaq en los últimos meses (revalorización del 13,06% en el año y del 5,50% desde el 30 de junio) si bien creen que la situación actual es muy distinta de la burbuja del 2000. Las compañías están cotizando con unas valoraciones moderadas, con un PER del índice estimado de 17 veces para 2015 que, aunque es algo más elevado que el de otros índices, es consistente con los márgenes de las compañías. El reto en los próximos trimestres será que las empresas tecnológicas puedan mantener estos márgenes (media del margen operativo del 18%). Además, las compañías tecnológicas tienen clientes reales y modelos de negocio que funcionan, y con una cartera de productos cada vez más asentada en la vida cotidiana de los ciudadanos.

Por su positiva evolución por rentabilidad en los tres últimos años, con un coste de volatilidad bastante controlado, el fondo obtiene la calificación cinco estrellas de VDOS.

Paula Mercado (VDOS)