Mejores perspectivas para Latinoamérica en 2017

13/02/17 - Análisis Fondos de inversión y Sociedades

Tras un año de crecimiento plano en 2015, Latinoamérica comenzó a notar la recesión ya durante el primer trimestre del pasado año y su situación empeoró a medida que el año avanzaba. Una estimación de datos provisionales agregados muestra cómo el Producto Interior Bruto (PIB) de la región descendía un 0,5 por ciento interanual en el último trimestre, algo inferior a la contracción del 0,9 por ciento del trimestre anterior.

Mejores perspectivas para Latinoamérica en 2017

Aunque este resultado apunta a una estabilización gradual de su economía, 2016 será recordado como el año con el peor comportamiento económico desde el comienzo de la crisis financiera en 2009. Según las estimaciones, la economía latinoamericana se contrajo un 0,7 por ciento en 2016, reflejando el duro ajuste económico en Argentina, la recesión más dura de Brasil de las últimas décadas, el profundo descenso de la actividad económica en Ecuador y la depresión económica más dura de su historia en Venezuela.

Para 2017 las expectativas económicas de Latinoamérica parecen haber mejorado, esperándose una modesta recuperación, no exenta de riesgos, con un crecimiento esperado del Producto Interior Bruto de 1,60 por ciento. Los datos económicos se mantuvieron débiles en la región durante 2016, con la creciente incertidumbre generada en torno a la victoria de Donal Trump sumándose a las dudas sobre la trayectoria de recuperación en 2018. La posibilidad de que la presidencia de Trump pueda ser proteccionista y favorecedora de una expansión fiscal considerable, ha alterado las expectativas sobre la política monetaria de EEUU. Esta posibilidad es una potencial amenaza en el horizonte para varias divisas de la región, aumentando a su vez el riesgo de una política monetaria más restrictiva.

La renta variable de la región latinoamericana refleja las expectativas sobre la evolución de su economía en los dos últimos años. El índice MSCI Emerging Markets (EM) Latinoamérica registra un retroceso por rentabilidad durante 2013, 2014 y 2015, correspondiendo a 2015 el más notable, con un 30,82 por ciento. Sin embargo, ya en 2016 se anotaba una recuperación de 31,47 por ciento.

En la misma línea, la categoría de fondos de inversión VDOS de Renta Variable Internacional Latinoamérica avanzaba el pasado año un 29,65 por ciento, acumulando desde el comienzo de año un 9,33 por ciento. De este grupo de fondos, con calificación cinco estrellas de VDOS, el más rentable es la clase A de acumulación en euros de BNY MELLON BRAZIL EQUITY FUND que en el año obtiene una rentabilidad de 12,01 por ciento y un 98,67 por ciento en el último año, con un dato de volatilidad en este último periodo de 36,39 por ciento. Con el objetivo de lograr una revalorización del capital a largo plazo, invierte principalmente en renta variable de empresas de Brasil, tomando como referencia el índice MSCI Brazil 10/40. Las mayores posiciones en su cartera corresponden a la petrolera brasileña PETROBRAS (7,55%) el holding de los sectores financiero e inmobiliario ITAUSA (7,5%1) el banco BRADESCO (4,73%) la papelera SUZANO PAPEL (4,58%) y la metalúrgica GERDAU MET (4,55%).

De la gestora escocesa Aberdeen, la clase A2 de capitalización en dólares de ABERDEEN GLOBAL - BRAZIL EQUITY se revaloriza un 10,92 por ciento en el año y un 85,69 por ciento en el último año, registrando en este último periodo un también elevado dato de volatilidad de 34,52 por ciento. Como el anterior, está referenciado al índice MSCI Brazil 10/40, invirtiendo al menos dos tercios de sus activos en renta variable de empresas con domicilio social en Brasil o que realicen la mayor parte de sus actividades en este país. Entre sus mayores posiciones en cartera encontramos nombres como el banco Bradesco (9,20%) el holding Itau Unibanco Holding SA (7,71%) la segunda cadena brasileña de grandes almacenes Lojas Renner SA (7,64%) la compañía de bebidas Ambev SA (6,25%) y el holding del sector alimentario BRF SA (5,96%).

Un 10,65 por ciento es la rentabilidad alcanzada durante el año por la clase B de capitalización de SANTANDER AM BRAZILIAN EQUITY. A un año, se revaloriza un 92,82 por ciento, con un dato de volatilidad de 32,49 por ciento. El fondo invierte en una cartera diversificada y activamente gestionada, principalmente de valores de renta variable emitidos por empresas brasileñas. Entre sus mayores posiciones, encontramos acciones de Banco Bradesco SA (8,81%) el mayor operador brasileño de tarjetas de crédito Cielo SA (6,74%) Petrobras (6,58%) el grupo asegurador BB Seguridade Participacoes SA (6,52%) y la compañía minera Vale SA (4,87%).

La producción industrial brasileña se ha tornado casi positiva en diciembre, con la fortaleza de la economía estadounidense y la debilidad del dólar impulsando las acciones brasileñas. Podría incluso decirse que Brasil cuenta con las mejores características de un mercado emergente; es un mercado extremadamente cíclico debido a su elevada exposición a las exportaciones de materias primas y está muy ligado a las oscilaciones del dólar, debido a su elevada carga de deuda en dólares estadounidenses.

Un dato interesante sobre Brasil es que tanto exportaciones como importaciones comenzaron a declinar en 2011, un año que supuso un máximo de varios años para las materias primas, si tomamos su evolución durante el primer trimestre de 2016 como mínimo. El país ha eliminado completamente su superávit comercial en los últimos años.
 

Paula Mercado (VDOS)