Infraestructuras, columna vertebral de la economía mundial

06/07/20 - Análisis Fondos de inversión y Sociedades

La inversión en infraestructuras presenta importantes atributos que la hacen atractiva para los inversores que buscan crecimiento y rentas a largo plazo. Las infraestructuras son esenciales para el crecimiento económico global, cubriendo necesidades tan amplias como carreteras y autopistas, conducciones de agua y aguas residuales. Más recientemente incluye también torres Wifi, energías renovables y satélites.

A medida que la población crece y la tecnología continúa avanzando, hay una necesidad continua de actualizar y construir nuevas infraestructuras para asegurar las redes de transporte, los sistemas eléctricos y otras instalaciones, que han de mantenerse actualizadas para su correcto funcionamiento y ser capaces de sustentar la evolución de la economía global y el continuado aumento de la población global.

El sector, que ha resistido especialmente durante otros periodos difíciles, no ha sido inmune a la pandemia del coronavirus. Algunas de las acciones de las compañías de este sector, concretamente transporte y energía, quedaron atrapadas en la fuerte corrección de mercado de marzo pasado.

Pero, si bien las expectativas para la economía y el mercado en general continúan siendo inciertas, las oportunidades que la inversión en infraestructuras ofrece a largo plazo no sólo se mantienen, sino que han mejorado. A medida que la transición hacia una economía digital y baja en carbono gana impulso, la necesidad de invertir en infraestructuras nuevas o en la mejora de las existentes ha captado la atención de la comunidad inversora.

De los fondos que invierten en compañías de este sector, se ha hecho una selección de los de mayor calificación VDOS, de cinco y cuatro estrellas, con una aportación mínima igual o inferior a 6.000 euros que y se sitúan en las primeras posiciones por rentabilidad a tres meses.

El más rentable de este grupo es la clase LC de DWS INVEST GLOBAL INFRASTRUCTURE con una revalorización de 14,39 por ciento. En el último periodo anual su rentabilidad es de 0,61 por ciento (-5,84 por ciento, la media de la categoría) con un controlado coste por volatilidad de 19,59 por ciento, que lo sitúa en el segundo mejor grupo de su categoría sectorial VDOS de Construcción por este concepto, en el quintil cuatro. Invierte en acciones del sector global de infraestructuras, incluyendo subsectores como transporte (carreteras, aeropuertos, puertos marítimos y redes de ferrocarril) energía (generación, transmisión y distribución de gas y electricidad) agua (irrigación, agua potable y aguas residuales) y comunicaciones (torres de telecomunicaciones y repetidores, satélites y cableado de fibra óptica y cobre). Toma como referencia para su gestión el índice Dow Jones Brookfield Global Infrastructure. Entre sus mayores posiciones encontramos acciones de Crown Castle International Corp (Specialized REITs) (8,9%) American Tower REIT Inc (Specialized REITs) (8,50%) Sempra Energy (Multi Utilities) (6%) y TC Energy Corp (Oil & Gas Storage & Transportation) (5,40%). Aplica a sus participes una comisión fija de 1,50 por ciento.

Denominado en euros, la clase E de capitalización de GOLDMAN SACHS GLOBAL INFRASTRUCTURE EQUITY PORTFOLIO avanza un 13,75 por ciento por rentabilidad a tres meses. A un año, no consigue situarse en terreno positivo, cediendo un -0,53 por ciento (-5,84 por ciento la media de la categoría) con un dato de volatilidad bastante controlado de 19,41 por ciento que lo sitúa entre los mejores de su categoría por tal concepto, en el quintil cinco. También referenciado al índice Dow Jones Brookfield Global Infrastructure, busca maximizar la rentabilidad total a través de la revalorización del capital y la obtención de ingresos. Invierte al menos dos tercios de sus activos netos en valores mobiliarios que ofrezcan exposición a empresas comprometidas o relacionadas con el conjunto de sectores de infraestructuras, domiciliados o con exposición comercial a mercados desarrollados, aunque puede también invertir en mercados emergentes. Las mayores posiciones en su cartera están representadas por los títulos de American Tower Corp (9,65%) Crown Castle International Corp (7%) Enbridge Inc (5,53%) Vinci SA (5,29%) y National Grid PLC (4,90%). La suscripción supone un desembolso inicial mínimo de 1.500 euros, aplicando una comisión fija de 1,50 por ciento a sus participes.

Denominado en dólares, la clase I de MSIF GLOBAL INFRASTRUCTURE registra en los últimos tres meses un avance por rentabilidad de 12,71 por ciento, cediendo a un año un 3,27 por ciento, con un dato de volatilidad en este último periodo de 2,57 por ciento. El equipo gestor del fondo aplica un proceso de inversión ascendente (bottom-up) bien definido, orientado a valor y centrado en la inversión en títulos de renta variable de compañías cotizadas de infraestructuras que, en su opinión, ofrecen el mejor valor respecto a la infraestructura subyacente y sus perspectivas de crecimiento, independientemente de las tendencias del mercado a corto plazo. Los títulos con mayor peso en su cartera son American Tower Corp (9,51%) Crown Castle International Cor (6,24%) National Grid plc (4,06%) TC Energy Corp (3,61%) y Promotora y Operadora de Infraestructura S.A.B. de C.V. (Pinfra) (3,10%). Sus participes soportan una comisión fija de 0,85 por ciento.

Las infraestructuras juegan un importante papel en el tejido de la sociedad moderna, sirviendo de espina dorsal de la economía mundial, tanto en los buenos como en los malos tiempos.

Si bien los precios de las acciones en todo el mundo se recuperaron en cierta medida de sus mínimos de marzo durante el segundo trimestre de 2020, las políticas aplicada para combatir la propagación del coronavirus han seguido perturbando los negocios, con consecuencias para los inversores, al menos en el corto plazo. Las perspectivas económicas siguen siendo inciertas, un entorno en el que las compañías cotizadas de infraestructuras pueden mostrar su valor.

P.M. (quefondos.com)