El mejor año en más de una década para los fondos de inversión
Tras años de subidas generalizadas de los mercados, muchos de ellos en máximos históricos, son muchas las voces que alertan sobre una posible burbuja. Sin embargo, los inversores en fondos de inversión mantienen su confianza en ellos para ver crecer sus ahorros.
No en vano, a punto de terminar el año, los fondos de inversión nacionales llevan camino de lograr su mejor año en término de captaciones netas, desde el 2014, año en el que se lograron captaciones netas de 35.062 millones, frente a los 32.552 que acumula en lo que llevamos de 2025. Y en lo que resta de mes, aun cuenta con margen para superar esta cifra.
Sin duda, estas captaciones netas se han visto impulsadas por la actividad de las entidades bancarias, con más de 21.813 millones, siendo Caixabank el grupo más destacado con 7.017 millones, seguido de Bankinter con 2.697 millones, Ibercaja (2.276 millones), Unicaja Banco (2.199 millones) y Kutxabank (2.155 millones).
En términos porcentuales son las sociedades cooperativas de crédito las que han registrado un mayor incremento por captaciones netas, con un 18,25 %, seguido de aseguradoras (10,54 %) y grupos independientes (9,60 %).
Por Categorías VDOS las más destacadas en el año tienen un carácter conservador, siendo la de RF euro corto plazo la que mayores captaciones concentra con 7.839 millones, seguido de Monetario euro plus y RF euro largo plazo con 5.282 y 4.913 millones respectivamente.
Entre los fondos más destacados por captaciones netas de cada una de estas categorías encontramos el BBVA Ahorro empresas, con 1.142 millones en el año. Un fondo que, según su política de inversión invierte en activos de renta fija pública y privada denominados en euros, con una duración media de su cartera inferior a 6 meses y, en cualquier caso no superará los 2 años, tomando como índice de referencia el Euribor a 3 meses, lo que le sitúa en la categoría VDOS de RF euro corto plazo. Con un perfil de riesgo de 1 en una escala del 1 al 7 y un horizonte mínimo de inversión recomendado de 1 año, el fondo logra en el año una rentabilidad del 2,14 %, siendo esta de un 9,12 % a 3 años, con una volatilidad a un año de un 0,16 %.
Entre los fondos de la categoría Monetario euro plus sobresale el CAIXABANK RENTA FIJA CORTO PLAZO. Según establece, el fondo invierte mayoritariamente en activos de renta fija pública y privada de emisores de la zona euro, con una exposición a riesgo de divisa máxima del 10% y con una duración media de la cartera inferior o igual a un año. La gestión toma como referencia la rentabilidad del índice ICE BofA 1-3 Year Euro Large Cap Corporate Index (ERL1) en un 35%, el índice ICE BofA Euro Currency 1-Month Deposit Offered Rate Constant Maturity Index (LEC1) en un 15% y el índice ESTR Compouded Index (ESTCINDX) en un 50% y cuenta con un horizonte temporal recomendado de 1 año y un perfil de riesgo de 2 en una escala del 1 al 7. En su clase sin retro, el fondo cuenta con una rentabilidad en el año de un 2,47 %, con una volatilidad a un año de un 0,22 %.
En el caso de la categoría de RF euro largo plazo, destaca el IBERCAJA RF PRIVADA FLEXIBLE, un fondo de reciente creación que invierte principalmente en activos de renta fija euro, mayoritariamente privada, con una duración media de la cartera de entre 0 y 7 años, en función de la visión del equipo gestor. Además, el fondo promueve característica medioambientales y/o sociales en línea con el artículo 8 SFDR. Con un horizonte de inversión recomendado de 3 años, el fondo mantiene un perfil de riesgo de 2 en una escala del 1 al 7.
A falta del cierre definitivo de diciembre, todo apunta a que 2025 marcará un punto de inflexión en la industria nacional, no solo por el volumen histórico de captaciones, sino por la consolidación del fondo de inversión como el vehículo preferente de ahorro frente a alternativas tradicionales como los depósitos. El reto para las gestoras en el próximo ejercicio será, por tanto, acompañar a estos partícipes en la gestión de la duración y en la rotación hacia activos de mayor valor añadido a medida que el ciclo de tipos evolucione.