Impuestos a la carta para los fondos de inversión

20/09/23 - Noticia Fondos de inversión y Sociedades

Con la subida de los tipos de interés, los bancos pequeños y los online han comenzado a ofrecer rentabilidades en torno al 3% y superiores en los depósitos bancarios. La gran banca continúa mostrándose renuente a seguir esta estela de subidas, aunque la pasada semana CaixaBank sacaba al mercado un depósito a un año con rentabilidad del 2% (condicionada, en parte, a la contratación de otros productos), abriendo el camino a sus colegas.

Mientras los depósitos empiezan a despertar después de casi una década de tipos cero o negativos, la otra alternativa para el ahorrador son los fondos de inversión, con su generosa gama de modalidades (monetarios, renta fija, Bolsa, indexados, etcétera). Depósitos y fondos ofrecen ventajas e inconvenientes para el ahorrador, pero destaca en los segundos su gran flexibilidad a la hora de pagar impuestos por las ganancias obtenidas.

Como explica Paula Satrústegui, socia de asesoramiento patrimonial de Abante Asesores, unos y otros tributan en la base imponible del ahorro, aunque en diferentes apartados: los depósitos se consideran rendimientos del capital mobiliario (también los intereses de la renta fija, los dividendos), mientras que los fondos figuran dentro de ganancias y pérdidas patrimoniales (junto con las acciones, las plusvalías de la vivienda…). Eso sí, ambos tributan lo mismo. Este 2023 se modificó al alza la escala de gravamen del ahorro del IRPF (impuesto de la renta de las personas físicas) para las más abultadas. Así, para las ganancias hasta 6.000 euros, el ahorrador paga el 19% de esa cantidad; entre 6.000 y 50.000 euros se eleva al 21%; de 50.000 a 200.000 euros llega al 23%, y para ganancias entre 200.000 a 300.000 euros es del 27% (antes 26%), y cuando son superiores a 300.000 euros Hacienda se lleva el 28% de la plusvalía (antes 26%)...

Luis Aparicio (El País)
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