Fondos de inversión de rentabilidad absoluta para obtener rentabilidad con una baja volatilidad

27/02/23 - Análisis Fondos de inversión y Sociedades

En un contexto como el actual, en el que vemos que la volatilidad se apodera de los mercados, que venimos de un 2022 complicado para la gestión de activos y las perspectivas son inciertas, los fondos de rentabilidad absoluta se convierten en una opción especialmente interesante para los inversores.

Y es que, si bien todos los fondos tienen como objetivo obtener un rendimiento positivo, la mayoría de fondos miden su gestión en función de su índice de referencia, como pueden ser el Ibex 35 o el S&P 500, independientemente de que el retorno sea positivo o negativo.

Por el contrario, los fondos de rentabilidad absoluta adoptan un enfoque distinto, marcando como objetivo de gestión la obtención de un rendimiento positivo independientemente del entorno del mercado, invirtiendo en activos del mercado monetario, de renta fija o de renta variable indistintamente, según el criterio de clasificación de VDOS. Además en muchos casos se marcan como premisa conseguir este rendimiento positivo fijando una volatilidad máxima para conseguirlo.

Entre los fondos de retorno absoluto que en el último año han mantenido una volatilidad inferior o igual a un 2 %, cabe destacar el PICTET TR – ATLAS  en su clase P en euros, con una rentabilidad a 3 años de un 9,53 % y de un 12,55 % a 5 años y en lo que llevamos de año logra un 0,49 %, con una volatilidad en el último año de un 1,59 %. Gestionado por Matthieu Fleck, utiliza una combinación entre análisis de mercado y análisis fundamental de empresas para seleccionar valores que ofrecen perspectivas de crecimiento favorables a un precio razonable (posición larga) mientras vende valores de empresas que parecen sobrevaloradas (posición corta), según explica su propia política de inversión. El fondo además integra factores ASG en su proceso de decisión con el fin de mejorar su perfil de riesgo y remuneración (artículo 6 SFDR).

Igualmente destacado por su rentabilidad a 34 años encontramos el DUNAS VALOR PRUDENTE en su clase I, que logra un 3,33 %, siendo esta de un 4,92 % a 3 años y un de un 0,84 a un año, con una volatilidad de un 1,16 % en este mismo periodo de tiempo. El fondo busca oportunidades de inversión en diferentes activos, usando estrategias bajistas para activos considerados como sobrevalorados o como cobertura de los riesgos fundamentales y de mercado de la cartera. El fondo promueve las características ASG (artículo 8 SFDR).

El CANDRIAM INDEX ARBITRAGE en su clase R logra a su vez una rentabilidad a 3 años de un 3,14 %, con un 0,42 % en lo que llevamos de 2023 y una volatilidad a un año de un 0,89 %. Gestionado por Emmanuel Terraz, Célia Fseil, Sébastien de Gendre y Damien Vergnaud, cuenta con una estrategia conservadora del fondo de cartera mediante bonos e instrumentos del mercado monetario, y una estrategia de inversión dinámica basada en una estrategia de arbitraje sobre acciones, en particular en el contexto de ajustes de índices, de operaciones con valores (por ejemplo empresas afectadas por una escisión) o el descuento de activos negociados.

Si bien en contextos de bonanza, estos fondos pueden no resultar los más llamativos para el inversor, en contextos de incertidumbres o de caídas generalizados, como el que hemos vivido durante el pasado año pueden resultar un buen complemento para una cartera bien diversificada.

S.O. (quefondos.com)